Los tres Consejos del Instituto sesionan y afianzan la opción por un nuevo modelo de gobernanza
Hno. Armin Luistro, del 10 al 12 de febrero se reunieron en la Casa Generalicia, en Roma, por primera vez, los tres Consejos del Instituto: el Consejo General, el Consejo Internacional de Asociación y Misión Educativa Lasaliana (CIAMEL) y el Consejo Económico Internacional (CEI).
“Este momento es un parteaguas de una historia que se ha ido construyendo durante muchos años, pero, sobre todo, después del 46.º Capítulo General, que pidió un nuevo modelo de gobernanza del Instituto”, comenta el Hno. Carlos Gómez, Vicario General, al subrayar que, si bien, “esto es fácil decirlo, fácil escribirlo, cuando nos encontramos con una realidad como esta, tenemos que empezar a ser creativos para entender cómo es una nueva manera de gobernar el Instituto”.
Un llamado a la sinodalidad
El Vicario General también sostiene que, ante el llamado de la Iglesia a la sinodalidad, “que resuena en todos los continentes”, la sinodalidad también implica “romper con la manera como tradicionalmente se han tomado las decisiones en la Iglesia”, para volver a una práctica que tiene que ver son sus orígenes. Ya no se trata, entonces, de que solo un grupo tome las decisiones y todo el Pueblo de Dios obedezca, sino que “desde la base se pueden ir construyendo los consensos y lo que realmente nos va a comprometer a todos”.
De ahí que esta primera sesión conjunta entre los tres Consejos del Instituto, se haya situado en continuidad con la Asamblea Plenaria que se celebró en julio de 2024, y retomando la síntesis que brotó de ella, para “discernir y caminar juntos”.
“Así que en estos tres días los tres Consejos se han reunido para conversar sobre cómo podemos trabajar juntos de manera sinodal”, afirma el Hno. Ricardo Laguda, miembro del Consejo General, al manifestar si esperanza de “que estos tres Consejos guíen y dirijan el Instituto y a la Familia Lasaliana en los próximos años”.
“La idea es que el Consejo General trate de establecer la visión general y las orientaciones para todo el Instituto, y es de esperar que los otros dos Consejos puedan apoyar al Consejo General. Por ejemplo, el Consejo Económico tratará de asegurar la sostenibilidad financiera de la misión en el Instituto, y el Consejo de la Misión tratará de ayudarnos en lo que se refiere a la Familia Lasaliana y a la Formación Lasaliana, para asegurar la coherencia en la forma en que los Colaboradores participan y se implican en la Misión Lasaliana”.
En el caso del Consejo Económico Internacional, su Presidente, Nestor Tan, explica que “tiene la tarea de identificar y preservar el patrimonio del Instituto en nombre del Hermano Superior y del Consejo General, la armonización de los procesos en las diferentes instituciones para facilitar la gobernanza, la optimización del valor que obtenemos en consecuencia, y asegurarnos de que prevemos y planificamos para el futuro, incluyendo la creación de estructuras adecuadas que puedan transmitirse de generación en generación”. En esta labor, resulta fundamental “asegurarnos de que se compartan las buenas prácticas”, apunta el seglar lasaliano.
Aprendizaje mutuo y corresponsabilidad
El balance es muy positivo, como detalla Kurt Schackmuth, miembro de CIAMEL: “estos días juntos han supuesto una oportunidad para que el CIAMEL y los demás Consejos tengan un aprendizaje mutuo, así como para ejercer la corresponsabilidad de la misión como parte de la nueva estructura de gobernanza del Instituto”. “El CIAMEL, en particular, ha decidido que nos centraremos en la comunicación con los Consejos de la MEL y otras estructuras de gobernanza compartida y en el trabajo con las Comisiones”, añade.
Por su parte, el Hno. Carlos Gómez señala que “una de las lecciones más interesantes de todo esto es la manera tan grande como se enriquecen los temas, cuando se enriquecen las reflexiones, porque tenemos perspectivas de distintas ópticas y no exclusivamente de como en el Consejo General la pudiéramos ver”, toda vez que “muchos de los temas que discutimos requieren de otros ángulos de visión, porque siempre tendrán implicaciones financieras, y tendrán implicaciones en la misión. Y evidentemente que necesitamos justamente estas reflexiones que nos ayudan a aterrizar y nos ayudan a mostrar los nuevos horizontes”.
“Evidentemente que sabemos que hay temas exclusivos de los Consejos, por ejemplo: el Consejo General tiene que seguir trabajando en temas que implican necesariamente la vida de los Hermanos (…); pero los temas que tienen que ver con la misión, con la financiación de la misión y su sostenibilidad, tiene que ver con muchas personas más”, explica el Vicario General.
“El camino que se ha iniciado se irá enriqueciendo con el tiempo, pero los primeros pasos se han ido dando, y yo creo que en estos momentos el balance es muy positivo, y también la invitación de que estos mismos movimientos sean vividos en los distintos lugares donde el Instituto hace presencia”, concluye el Hno. Carlos Gómez.